Desde hace siglos, la gente ha estado creando riqueza y proporcionando para su futuro a través de la inversión en el mercado y el comercio de valores. Durante la mayor parte de ese tiempo, dichas inversiones se realizaron exclusivamente a través de grandes y poderosas casas de bolsa y banca de inversión. La gestión patrimonial era algo que se realizaba por poder, y los reguladores y legisladores a menudo luchaban por gestionar el potencial de corrupción.